Divergente es una sociedad disfrazada de democracia. Divergencia es independencia en tu marca personal.

Cine y habilidades

Verdadero amante de la relación y las enseñanzas del cine con las habilidades personales y sociales, soy de los convencidos que muchos de los guiones cinematográficos de ficción esconden ideas visionarias que, lejos de ser imaginarios, son en cierto modo el final de un camino en el que nos encontramos (qué grande Asimov).

Divergente

Divergente es una de ellas. Y me llamo la atención en su día cuando la vi, pero mucho mas en su reposición para Tv ayer mismo.

La sociedad que nos dibuja la película es una sociedad neo marxista disfrazada de democracia donde las personas ocupan un rol social en función de la facción en la que se han educado, la de tus padres, hasta que llega el momento de la madurez, cuando puedes elegir libremente, más o menos.

Igual que si dividiéramos ahora nuestra sociedad entre funcionarios, políticos, trabajadores, empresarios y altruistas la sociedad que plantea el guión se forma por Verdad (sinceridad y orden), Erudición (conocimiento y lógica), Cordialidad (paz, buen rollo), Abnegación (entrega y servicio a los demás) y Osadía (el cuerpo de elite para la defensa).

“Nunca debes pensar en ti mismo”

Todo menos pensar. No cabe el artista, el pensador. No hay sitio para el individualismo, pero tampoco para la propia afirmación personal.

“El futuro pertenece a aquellos que saben cual es su sitio”,

se comenta para resignación general de los iniciados. No hay posibilidad de marcha atrás. Si te equivocas, no tienes futuro.

En Divergente los que mas molan son los de Osadía. Parecen Los mas divertidos, animados y arriesgados. Pero es solo una fachada, puesto que esta elite carece internamente de escrúpulos y se convertirá en la fuerza de choque de la corrupción del poder.

“Si quede entrar en Osadía tienes que saltar. En Osadía jamás se rinden”.

Los que no encajen o fracasen en su periodo de adaptación a cada facción quedan como abandonados, una suerte de marginados sociales. No se acepta el fracaso.

“Si no encajas en una de las categorías no pueden controlarte. Eres una amenaza”.

Los divergentes, los que se resignan a asumir el rol que les designan los dirigentes, se detectan porque tienen un pensamiento analítico, son creativos e imprevisibles. Son peligrosos.

Supongo que, como todos, durante la peli nos planteamos en cuál encajamos mejor. Ahí está la trampa, sólo puedes elegir entre lo que te ofrecen. Si te planteas algo más allá eres un rebelde.

Bienvenido a la divergencia.

Elige por ti mismo, hay una visión universal de la justicia, pero tú tienes la tuya propia, de lo que es justo y de lo que no lo es. Ser uno mismo.

La divergencia es de los artistas, los creativos, los emprendedores, los outsiders. Y si te consideras en la divergencia, el siguiente paso es la insurgencia. Alguien tendrá que cambiar esto.

Y digo yo que visto así, tiene mucho que ver con la marca personal ¿no crees?

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